EN EL MUNDO A CADA RATO
Era
un niño normal. Cierto día se alistaba para ir a la escuela; se peinaba y se vestía
porque no tenía uniforme.
Tenía
que caminar mucho porque se escuela estaba muy lejos, ya que no iba en la que
estaba en donde el vivía.
Su
profesora era lista e inteligente y había preparado una danza y teatro. el niño
se le quedo viendo a una estatua que estaba en el camino hacia su escuela. su
mirada fue muy rara. Al parecer era una estatua que al parecer le rendían culto
El
niño venia de Agaram.
Saliendo
de la escuela, el niño tenía que trasladarse al lugar en donde estaba su
trabajo.
Trabajaba
con un señor, vendiendo muruku, y le pagaban con rupias.
El
niño trabajaba para ayudarle a su abuela, además de que juntaba dinero para
comprarse su uniforme de la escuela porque no tenía; su camisa era muy cara y
al parecer lo tenía que llevar a la fiesta de su escuela.
Toda
la gente lo veía muy mal, todos lo hacían un lado; cierto día iba por agua a la
llave en donde todos iban, y las señoras le dijeron que esa llave ya no servía.
Prefirieron cerrarla con tal de que el niño no agarrara agua de ahí.
El
niño fue al rio; cerca de ahí vivía una niña que era su amiga; ella tenía
problemas familiares y se mudarían a la casa de su abuela en el otro pueblo.
El
niño comenzó a enfermarse, y su abuela lo llevo al doctor.
Desafortunadamente,
el niño tenía VIH, su abuela comenzó a llorar porque no tenía recursos para
pagar su tratamiento ni a quién recurrir.
Un
dia conto el dinero para ir por el medicamento del niño, pero no le alcanzo
para comprarlo; solo dijo que regresaba después.
Las
mamás de los demás niños no dejaban que sus hijos se acercaran a él.
El
papá de la niña que era su amiga, al parecer tenía la misma enfermedad, y por
eso se mudarían, el señor estaba demasiado flaco, además de que no tenían
recursos para poder comer. Solo tenían una vaca, de la cual ordeñaban su leche
para venderla.
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